El Grupo Por Ávila en la Diputación Provincial ha votado esta mañana en contra del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Interno del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios de la Diputación en el Pleno de la Diputación Provincial al considerar que se ha descafeinado la propuesta inicial y que nace incompleto.
El portavoz de Por Ávila, Óscar Jiménez, ha calificado el texto de “incompleto y descafeinado”, y que además “tendrá que ser modificado”, tal y como avanzó el portavoz del Equipo de Gobierno: “está supeditado a modificaciones posteriores”, algo que Por Ávila ya había pedido en el mes de mayo.
Y es que se trata de un documento que no ha sido pactado ni dialogado con todos los agentes ni grupos políticos, aunque digan lo contrario. Un Reglamento al que le faltan cosas tan básicas como la dotación que tendrán los turnos de guardia, que antes si venían especificados.
En la exposición de motivos del reglamento se dice que entre los objetivos se encuentra “establecer la distribución de los distintos parques de bomberos, dentro de cada una de las áreas de intervención previamente determinadas”. Pero nada de esto aparece en el articulado. Y tampoco cuáles serán las áreas de intervención.
Además, se pretendía “definir la tipología de los parques en función de las características de cada una de las áreas de intervención y los servicios en los que se integran”, pero tampoco se recoge nada de los tipos de parques de bomberos, algo importante ya que tenemos cuatro de un tipo y uno de otro.
“Es un documento genérico y tan escaso que deja fuera cualquier asunto comprometido, los asuntos de enjundia, de personal”, destacaba Jiménez.
Según reconocía el portavoz de Por Ávila, a pesar del compromiso de que en todos los parques haya el mismo personal para que se pueda prestar atención las 24 horas del día, en este texto no se determinan las características y dotaciones mínimas para cada tipo de parque, como dicen en la exposición de motivos que se va a hacer. “Han perdido una ocasión de oro para que ese compromiso quedara plasmado en un documento oficial de organización”, valoraba.
Se ha pasado de un Reglamento de 63 artículos a 32. “Básico”, como lo calificó el señor Sánchez Mesón. Se ha quitado todo lo que tiene que ver con las condiciones laborales: derechos retributivos, jornada de trabajo, permisos, licencias, el sistema de selección del personal, el régimen disciplinario… y se queda en un escueto “se atenderá a lo relativo a la normativa vigente de aplicación para el personal funcionario”.
Además, Por Ávila no entiende que el diputado responsable del SPEIS saque pecho de “voluntad de negociación” y “mano tendida a todos los partidos”, “cuando al menos en nuestro caso no hemos celebrado ninguna reunión para negociar nada, y ni siquiera se han incluido en el texto nuestras propuestas de mejora al Reglamento. ¿Eso es voluntad de negociación con todos los partidos?”
Todo ello, según Jiménez, “por sacar adelante el Reglamento antes del verano, deprisa y corriendo, y que parezca que el suyo es un Partido Popular conciliador. Pero eso sería faltar a la verdad, como bien sabe el equipo de gobierno”.